¡Bienvenido al Club de los Buenos Días!

Sonríe, porque puede que el día sea gris,

pero dile a tu mente que tu actitud no lo es.

Saca pecho, hombros pa atrás.

Calma tu Ramona, con cariño.

Sal del modo hacer, vive el modo ser.

Toca, huele, observa, escucha,

saborea las cosas pequeñas,

y sobretodo, cuídate, date un respiro,

y dáselo a tu cuerpo, que lo necesita.

Respira hondo y por fin, suelta…

Suelta las tensiones, mira qué gustito da.

¡Bienvenido al Club de los Buenos Días!